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• Extracción de arcilla
La arcilla, el componente principal de los productos cerámicos, se extrae de la cantera y se almacena en lechos de homogeneización.
• Desmenuzado, mezcla y molienda
Previamente a su entrada en la fábrica, la arcilla se desmenuza, reduciendo y homogeneizando el tamaño del grano. A continuación, se mezclan arcilla, desgrasantes y aditivos, empleando silos independientes con dosificadores. Por último, se realiza la molienda con laminadores y/o molinos, consiguiendo una segunda reducción del tamaño del grano.
• Amasado
La mezcla arcillosa se introduce en la amasadora, donde se producirá la primera adición de agua, para obtener una masa plástica, moldeable por extrusión.
• Moldeo
Se hace pasar la arcilla por la extrusora, donde, mediante bomba de vacío, se extrae el aire que pudiera contener la masa y se presiona contra un molde, obteniendo una barra conformada con la forma del producto.
• Cortado y apilado
La barra conformada se hace pasar a través del cortador, donde adquiere las dimensiones finales del producto. El material cerámico se apila en estanterías o vagonetas antes de introducirlo en el secadero.
• Secado y cocción
El secadero se utiliza para reducir el contenido de humedad de las piezas hasta un 1-2%. Posteriormente, se introduce el material en el horno túnel para el proceso de cocción, alcanzando temperaturas de 850 °C a 1.200 °C.
• Empaquetado y almacenamiento
Las piezas cerámicas se desapilan de las vagonetas y se empaquetan en palets que se plastifican y almacenan en el patio exterior a la espera de ser transportados hasta las obras.
